La pared invisible: Cuando tu cuerpo no quiere levantarse
Sientes que el tiempo se detiene, y la cabeza no para de dar vueltas. Analizas, sobrepiensas, te preguntas por dónde empezar, y al final, la inercia gana. Te quedas paralizado por la impotencia, por el simple hecho de que el impulso choca contra una gran pared mental. No te preocupes, no estás solo. Esto nos pasa a muchos cuando queremos ponernos en acción.
Copia y pega esta URL en tu sitio WordPress para incrustarlo
Copia y pega este código en tu sitio para incrustarlo