Mientras los róveres de la NASA como Perseverance acaparan los titulares, la Agencia Espacial Europea (ESA) ha presentado un nuevo y prometedor explorador que podría redefinir el futuro de las misiones espaciales. Se trata de Olympus, un perro-robot diseñado para moverse por terrenos imposibles y adentrarse en cuevas y tubos de lava, donde ningún vehículo de ruedas ha podido llegar.
Un diseño único para superar obstáculos
A diferencia de sus predecesores con ruedas, el diseño de Olympus se basa en cuatro patas articuladas con terminaciones acolchadas que le dan una tracción superior. Este innovador sistema, desarrollado por el investigador Jørgen Anker Olsen en colaboración con la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología, le permite saltar y desplazarse con una agilidad extrema. En un planeta como Marte, donde la gravedad es mucho menor, un salto podría ser suficiente para sortear grietas y rocas que frenarían a cualquier otro explorador.
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Pruebas en microgravedad que asombraron a todos
Pruebas en microgravedad que asombraron a todos Para poner a prueba sus capacidades, la ESA llevó a Olympus a las instalaciones ORBIT en los Países Bajos, donde se recrean condiciones de baja gravedad. Allí, el robot demostró su potencial al usar un sistema de inteligencia artificial de aprendizaje por refuerzo. Con movimientos que imitaban la natación, logró corregir su postura, estabilizarse y realizar saltos controlados de pared a pared, aterrizando con precisión sobre sus cuatro patas. Estas pruebas confirman que Olympus está listo para el desafío.
El futuro de la exploración: Más allá de la superficie
La ESA ve en este perro-robot el inicio de una nueva era. Su capacidad para explorar el subsuelo de planetas y lunas, adentrándose en cavernas y tubos de lava, podría revelar secretos que hasta ahora han estado fuera de nuestro alcance. Olympus no solo promete llegar más lejos, sino también más profundo, convirtiéndose en un aliado ideal para misiones de larga duración. Su llegada podría marcar un punto de inflexión, eclipsando a los róveres actuales y abriendo la puerta a un tipo de exploración espacial más audaz y versátil.


